Lycanth-Boy

Navy es un chico de 14 años muy aficionado a la naturaleza y a la meditación. Un buen día, en una excursión al campo, vive una experiencia mágica: su espíritu, se ve transportado al mundo espiritual de Sílcux. Una vez allí, Navy se encontrará con Anaiyu, el dios lobo, que le hará darse cuenta de que no es un chico normal y corriente, sino el continuador de una larga dinastía de «lycantethrs» cuya misión es proteger el mundo espiritual de la presencia maligna de Sylax. Sylax es la auténtica personificación del mal, de la oscuridad, de todo lo que hay de negativo en el Universo. La mayor parte del tiempo, este siniestro personaje permanece sometido por el poder de Anaiyu y confinado en su mundo de tinieblas. Sin embargo, cada cierto tiempo cobra fuerza y renace, amenazando el mundo espiritual de Sílcux y a todos sus habitantes. Solo un espíritu valiente como el de Navy puede enfrentarse a él y devolver al Universo el equilibrio perdido.