Europa a tu aire. 80 rutas sobre ruedas

Menos de siete kilómetros separan Astigarraga de Hernani, otra de las poblaciones con un ADN más sidrero. El casco antiguo de la población, situado en una colina sobre el río Urumea, fue declarado Conjunto Monumental; todavía hoy se puede apreciar la característica forma ovalada de cuando estuvo amurallado. Merece la pena perderse por sus calles y descubrir algunos de sus tesoros arquitectónicos, como la parroquia de San Juan Bautista (siglo XVI) o la Gudarien Enparantza (plaza Mayor) con el edificio de la Casa Consistorial, entre otros. Hernani es también un punto importante dentro del Camino de Santiago en su trazado por el interior de Gipuzkoa, con el puente de Fagollaga y el Humilladero de Santa Cruz como elementos de interés.

Desde la perspectiva de la sidra, son muchas las sidrerías que ofrecen el típico menú y el ritual del txotx. Zelaia (Barrio Martindegi, 29; T. 943 555 851; www.zelaia.es) es una de las más afamadas; fue designada como la mejor sidrería de España por el periódico The Guardian. Su menú de sidrería empieza con un aperitivo a base de chorizo a la sidra y acaba con tejas y cigarrillos de Tolosa como postre, en un comedor que da directamente a la bien surtida y acondicionada bodega. Itxas-Buru (Osinaga Auzoa, 54; T. 943 556 879; www.itxasburusagardotegia.com) abre su establecimiento, situado en un ambiente de lo más rural, en la época del txotx y destaca por la calidad de sus sidras.

Sidrería Petritegi, en Astigarraga. @ David Carrasco

Unos ocho kilómetros hacia el oeste por la N-634 conducen hasta Usurbil, el tercero de los pueblos de la sidra de Donostialdea. También aquí vale la pena pasear por su núcleo histórico, que se extiende alrededor de la iglesia de San Salvador, para contemplar el palacio barroco de Atxega (siglo XVIII), así como la casa Saroe, con una rica fachada del mismo estilo. La ermita de San Esteban, en el barrio homónimo, ofrece unas vistas excelentes del entorno. La tradición pesquera del barrio de Aginaga es célebre por sus angulas.

Entre las sidrerías más recomendables se halla Aginaga (Aginaga Auzoa; T. 943 366 710; www.aginagasagardotegia.com), donde se puede degustar sidra natural elaborada en casa al totx durante todo el año y que dispone de una amplia carta de platos de cocina tradicional vasca, además del menú de sidrería. También Saizar (Kale-zahar Auzoa, 39; T. 943 373 995; www.sidrassaizar.com), uno de los mayores productores de sidra de Euskadi, ofrece una carta más variada que el del típico menú de sidrería, en la que sobresale una brasa de primer orden para pescados o chuletones.

Camino de los montes

La ruta se dirige a continuación hacia el sur por la A1, siguiendo el curso del río Oria aguas arriba hasta Tolosa, una villa de una gran importancia histórica que fuera antigua capital de Gipuzkoa. Su pasado dorado le ha legado un casco histórico lleno de monumentos de enorme interés. Su núcleo medieval está compuesto de estrechas callejuelas y encantadoras plazas, entre las que destaca la iglesia parroquial de Santa María (siglo XVII), que refleja el llamado gótico vasco. La iglesia y el convento de Santa Clara, el ayuntamiento barroco, los palacios de Idiakez, Atodo, Aramburu y la Diputación, el Archivo Provincial y la plaza de Euskal Herria son otros de los atractivos que el visitante irá descubriendo en su recorrido por la localidad. Para los amantes de las buenas panorámicas, las mejores vistas de Tolosaldea, la comarca circundante, se obtienen desde la ermita de Nuestra Señora de Izaskun, situada en el monte Uzturre, en la vecina Ibarra.

La gastronomía es un tema muy presente e importante en Tolosa. Todos los sábados desde hace siglos, se celebra el mercado, que transforma el centro de la villa en una feria de grandes dimensiones con un ambiente auténtico y acogedor. Los agricultores de la comarca se dan cita en el recinto del Tinglado o Zerkausia, uno de los tres que ocupa el mercado, donde se venden los productos más autóctonos y representativos de la zona. El municipio cuenta, además, con un interesante Museo de Confitería, en el que la familia Gorrotxategi muestra los utensilios que ha empleado desde 1680 para elaborar sus dulces creaciones. Y es que Tolosa tiene una enorme tradición dulce, que se expresa de la mejor manera en productos como los cigarrillos, las tejas y los xaxus, que no faltan nunca en el momento del postre en los numerosos asadores de la villa, donde los chuletones de buey y las alubias de Tolosa son ingredientes que provocan adoración.

Tolosa cuenta también con varias sidrerías. Destaca entre ellas Isastegi (Aldaba Txiki Auzoa, 15A; T. 943 652 964; www.isastegi.com), situada en un antiguo caserío reformado en plena naturaleza, en las faldas del monte Intxurre y rodeada de montañas, que permite degustar la sidra de elaboración propia en temporada de txotx y acompañada del suculento menú típico de sidrería.

En Tolosa abandonaremos el valle para orientarnos hacia el oeste por la GI-2634 en dirección a Azpeitia y el santuario de Loiola, uno de los monumentos más importantes de Euskadi. Este paraje se encuentra en pleno valle de Urola, rodeado de montañas y en un entorno idílico. El conjunto está edificado alrededor de la casa natal de Íñigo de Loyola (San Ignacio), fundador de la Compañía de Jesús (los jesuitas), que actualmente se extiende por todo el mundo. Se pueden contemplar la casa-torre medieval en la que Íñigo de Loyola nació en 1491 y la característica basílica (1738) con su majestuosa cúpula y su amplio pórtico. Para gozar del entorno natural del valle de Urola, nada mejor que hacerlo en un relajante recorrido en bicicleta por la Vía Verde del Urola, que parte de Azpeitia y pasa al lado mismo del santuario. De hecho, la ruta sigue el mismo camino de la vía verde, que a continuación pasa por Azkoitia y se dirige por un entorno montañoso de gran belleza hasta Zumarraga.

El país del queso idiazabal

Zumarraga cuenta con un rico patrimonio histórico. El núcleo urbano depara rincones tan emblemáticos como la plaza porticada de Euskadi, presidida por la estatua del conquistador de Filipinas Miguel López de Legazpi y donde se pueden ver varios edificios de interés, como el ayuntamiento neoclásico, del siglo XIX, o las casas Itarte y Uzkanga. La casa natal del conquistador, la casa-torre Legazpi, es también un punto a tener en cuenta, no muy lejos de la plaza. Otra construcción a visitar es la iglesia parroquial de Santa María de la Asunción, levantada a partir de 1576 en estilo gótico vasco y que cuenta con un hermoso pórtico enmarcado por una portada barroca.

Más allá de los innegables encantos de su núcleo urbano, los alrededores de Zumarraga bien merecen alguna que otra visita. Imprescindible es dirigirse a las estribaciones del monte Beloki, a un par de kilómetros de la población, para descubrir la ermita de La Antigua, conocida como la catedral de las ermitas. Fue construida en el siglo XIV sobre un antiguo fuerte defensivo del siglo XII rodeada de un bello entorno natural y que esconde un extraordinario interior, especialmente su cubierta en artesonado de madera de roble. Este lugar, rodeado de múltiples leyendas, forma parte de la Ruta de los Tres Templos de Tierra Ignaciana, junto a los santuarios de Loiola y de Arantzazu.

La ruta continúa desde Zumarraga en dirección este por la GI-632. En el municipio vecino de Ezkio-Itsaso, podremos respirar un evidente ambiente rural, en el que nos podremos sumergir visitando el Caserío Museo Igartubeiti (Ezkio Bidea; T. 943 722 978; www.igartubeitibaserria.eus), un caserío lagar del siglo XVI totalmente restaurado que recrea la vida real de la época a base de mobiliario y herramientas, e incluso olores y aromas. Además, organiza un sinfín de actividades, entre las que destaca la Semana de la Sidra, en octubre, que incluye la demostración del proceso tradicional de elaboración de la sidra de hace cuatro siglos.

Nos acercamos al tramo final de la ruta, en la comarca del Goierri, «tierras altas» en Euskera, cuya naturaleza rural y salvaje se aprecia en las montañas que la rodean, no solo las de la sierra de Aizkorri-Aratz, con la imponente silueta del monte Aizkorri (techo de Euskadi con 1548 metros), sino también las del Parque Natural de Aralar. A la altura de Ormaiztegi, nos desviaremos a la izquierda por una estrecha y revirada carretera que serpentea en dirección a Mutiloa y Zerain, donde podremos descubrir la fuerte tradición minera de estos valles, otrora totalmente vinculados con la extracción del hierro. Las históricas minas de Aizpea, más conocidas como la Montaña del Hierro, han sido declaradas Conjunto Monumental. Conviértase en minero por un día visitando el Centro de Interpretación Aizpitta, que incluye la visita a una antigua galería y a los hornos de calcinación, además de permitir numerosos recorridos por la Montaña del Hierro.

El Goierri también es tierra de sidra, como demuestran la media docena de sidrerías que se hallan aquí. En Zerain, visite por ejemplo la sidrería Oiharte (Barrio Irukarate-gain; T. 686 299 158; www.oiharte.com), cuya oferta enoturística incluye visitas guiadas, catas e incluso una casa rural.

Desde Zerain, el camino es rápido (por la GI-3520 y la GI-2637) hasta Idiazabal, la cuna del queso de oveja autóctono más reconocido del País Vasco. Aquí se encuentra el Centro de Interpretación y Degustación del Queso, donde puede convertirse en un experto en la oveja de raza latxa y la elaboración del queso idiazabal. Si le interesa el tema, no dude en visitar alguna de las queserías especializadas en la producción de este delicioso manjar. Aquí existen varias de ellas, aunque las encontrará a lo largo y ancho del Goierri. Y no existe nada mejor que combinar las degustaciones de este queso con una buena sidra.

La última etapa de nuestra ruta nos llevará por la A-1 hasta Ordizia, población situada a los pies del monte Txindoki (1346 metros) y que cuenta con un bonito casco histórico, aunque es principalmente conocida por su mercado semanal, cuyo origen se sitúa entre los siglos XI y XII, y que se celebra todos los miércoles desde 1512. Los vendedores se apostan en la plaza Mayor para comerciar con los productos típicos de la zona, y numerosos compradores y curiosos se dan cita para gozar del espectáculo de color y ambiente rural que se vive. Visite el Centro de Interpretación de Alimentación y Gastronomía D’Elikatuz, para conocer a fondo la historia de Ordizia y su mercado, y aprender sobre alimentación y salud.

La tradición vasca marca de forma significativa la cocina que debe acompañar a la sidra en el conocido como menú de sidrería, que está compuesto por la tortilla de bacalao y el bacalao frito con pimientos, seguido de un chuletón. Finalmente, como broche de oro, en los postres no falta el queso Idiazabal, que suele comerse con membrillo y nueces.

Antiguamente, la gente acudía a las sidrerías con su propia comida. Aquella costumbre fue evolucionando hasta el contexto actual, en el que la sidrería es a menudo un sinónimo de restaurante. De hecho, algunas de las más vanguardistas no se limitan hoy en día a servir solamente el menú de sidrería, sino que despliegan una oferta más amplia con otros platos típicos y apetitosas especialidades propias.

Info práctica

Área de San Esteban

San Esteban Auzoa, 28

20400 Tolosa

N 43° 08' 1'', W 2° 4' 59''

) +34 943 697 413

Abierta todo el año. Gratuita.

Tiene espacio para 12 autocaravanas y dispone de servicio de desagüe de aguas negras y grises, además de tener agua potable. A unos 800 m se encuentra el centro, donde se hallan todos los servicios, incluido un supermercado. Se admiten animales.

Eco Camping Arbizu

Paraje Utzu, km 5

31839 Arbizu

N 42° 53' 55.0", W 2° 2' 3.7"

) +34 848 470 922

www.campingarbizu.com

info@campingarbizu.com

Este campamento, que apuesta por un turismo sostenible, se halla a una media hora de Zerain y Ordizia, en la comunidad de Navarra. Ofrece alquiler de parcelas para caravanas y autocaravanas con toma de agua y desagüe, además de una conexión eléctrica. Existe la posibilidad de adherir un porche de madera para obtener sombra. El camping basó su construcción en conceptos de sostenibilidad, bioconstrucción, bioclimatismo y aplicación de energías renovables. Cuenta con un amplio abanico de instalaciones y servicios: zona deportiva, parque infantil, piscina, restaurante... e incluso un supermercado donde venden productos ecológicos y locales. También ofrecen la posibilidad de realizar diversas actividades en la naturaleza o en el propio campamento: senderismo, kayak en el lago, yoga, parapente, talleres de forja, visitas a una quesería, etc.

Península Ibérica

Rioja Alavesa

Los parajes de esta comarca alavesa se extienden entre los contrafuertes de la sierra de Cantabria y se asoman al valle del río Ebro en un entorno marcadamente rural y de gran belleza paisajística. La arquitectura y los grandes vinos tintos son las cartas de presentación de un lugar especial que reserva múltiples experiencias inolvidables para el viajero.

La ruta recorre de oeste a este el territorio de Rioja Alavesa. Comienza en Salinillas de Buradón, dentro del municipio de Labastida y muy cerca de la ciudad riojana de Haro. Discurre con la sierra de Cantabria como invariable testigo a la izquierda, a medida que recorremos poblaciones de fuerte carácter histórico y profunda huella vitivinícola como Samaniego. Desciende hacia el valle del Ebro para recalar en Elciego, visita Laguardia, la capital comarcal, y concluye en Labraza, cerca del límite con Navarra, tras pasar por Oyón, a muy poca distancia de Logroño.

La ubicación de los municipios que conforman Rioja Alavesa hace que esta comarca cuente con una cocina propia con algunos matices específicos con respecto al resto de Euskadi, basados en la fusión con la cercana gastronomía riojana. Uno de los rasgos diferenciales más obvios es que el pescado no es un ingrediente abundante por la lejanía del mar. Así pues, las carnes y los productos de la huerta conforman el universo básico de las recetas tradicionales.

• Distancia: 80 kilómetros de ruta

• Puntos de la ruta: Salinillas de Buradón - Labastida - Samaniego - Villanueva de Álava - Baños de Ebro - Elciego - Lapuebla de Labarca- Laguardia - Elvillar - Lanciego - Oyón - Moreda de Álava - Labraza

La sierra de Cantabria

El punto de inicio de la ruta se encuentra en la villa medieval de Salinillas de Buradón, dentro del municipio de Labastida. Nos encontramos en el extremo más occidental de Rioja Alavesa, en una pequeña población de un centenar de habitantes que posee un manantial salino del que tomó el nombre y que le dio una gran riqueza en la antigüedad. De ahí que cuente con un rico patrimonio medieval en el que destaca la muralla (siglo XIII), excelentemente conservada y con sus puertas norte y sur todavía en pie; la iglesia parroquial de la Inmaculada Concepción o el palacio de los condes de Oñate (siglo XVI), con la torre de los Sarmientos, Ayalas y Guevaras en su interior. Merece la pena pasear por sus callejuelas, dispuestas en una configuración de espina de pez. Desde el punto de vista vínico, en Salinillas no existen bodegas comerciales, aunque sí proliferan los tradicionales calados en el subsuelo, donde todavía se elabora vino de forma privada y para uso particular.

La N-124 y la N-232a conectan rápidamente Salinillas de Buradón con el núcleo también medieval de Labastida, situado a unos siete kilómetros y que todavía conserva dos puertas de la antigua muralla. El camino nos lleva por la orilla del río Ebro, que efectúa dos pronunciados meandros que nos separan de Haro, al otro lado, ya en La Rioja. Si ha visitado anteriormente la Rioja Alta, ya aquí se puede hacer a la idea del cambio de paisaje y del relieve más ondulado y montañoso que caracteriza a Rioja Alavesa. No hace falta más que dirigirse a la que es probablemente la bodega más reconocida del municipio, La Granja de Nuestra Señora de Remelluri (www.remelluri.com), para comprobarlo. Las visitas a su finca están organizadas en forma de paseos por su entorno natural y de viñedos que permiten contemplar el lagar de piedra, la necrópolis altomedieval y la ermita de Santa Sabina en recorridos de entre 60 y 90 minutos; además de ver la bodega y catar los vinos, por supuesto.

Labastida es un buen lugar para adquirir algunas botellas de Rioja Alavesa. Dispone de dos vinotecas donde hacer sus compras. El Laguito de Mikiza (C/ Mayor, 8; ) 945 331 484; http://mikizalabastida.wordpress.com) ocupa dos calados del siglo XV en pleno casco histórico, ofrece maridajes y dispone de una cava de puros única. Landa (C/ Florida, 8; ) 945 331 009) cuenta con una amplia oferta de vinos de la población y la subzona, así como de otras Denominaciones y productos de alimentación tradicionales.

En el mismo núcleo urbano de Labastida se ubican numerosas bodegas, la gran mayoría de carácter familiar y cuyas instalaciones ocupan históricos calados subterráneos. Es el caso, por ejemplo, de Tierra Agrícola Labastida (www.tierrayvino.com), localizada en una encantadora casa del barrio judío que data del siglo XIII; o de González Teso (www.gontes.com), en una construcción del siglo XIV de la parte alta de la villa; o incluso de Mitarte (www.mitarte.com), que tiene una antigua bodega medieval del siglo XIII en el casco antiguo y unas modernas instalaciones rodeadas de viñedos en las afueras.

Se puede profundizar en esa historia relacionada con el mundo del vino con una visita a algunos de los numerosos lagares excavados en la roca con más de mil años de historia y que se hallan diseminados por el término municipal. Puede recorrerlos por su cuenta o bien dejarse guiar por los expertos de Thabuca Wine Tours (www.thabuca.es), agencia especializada en actividades relacionadas con el mundo del vino en Rioja Alavesa. Los más activos pueden optar por combinar la cultura y el enoturismo con el turismo activo, en alguna de las actividades terrestres, acuáticas o aéreas que organiza Rioja Alavesa Turismo.

Retomaremos la carretera N-232a en dirección a Logroño, siguiendo el curso del Ebro aguas abajo. La próxima parada recomendada es Samaniego, una población que mantiene un casco urbano de piedra muy cuidado, que bien merece un paseo. Una caminata que podría terminar en Bodegas Ostatu (www.ostatu.com), una empresa familiar situada en un histórico edificio de piedra restaurado donde fusionan la tradición con la modernidad, con un más que acogedor y actual wine bar. Desde el mirador de su terraza, con vistas a la sierra de Cantabria y a un mar de viñedos, podrá ver también el edificio de Baigorri (www.bodegasbaigorri.com), una especie de cubo de cristal creado por el arquitecto Iñaki Aspiazu con la idea de adaptarlo de forma armoniosa a la topografía del lugar y que no es más que el más alto de los siete niveles en los que se organiza el proceso de elaboración. Participe en un curso en su aula de catas, goce de las vistas desde su mirador o bien coma en su restaurante.

Camino del valle del Ebro

Emprendemos desde Samaniego el descenso hacia el valle del Ebro por la A-3214, que enseguida nos conduce hasta Villabuena de Álava. Allí se encuentra otra de las bodegas de referencia de esta D. O., Luis Cañas (www.luiscanas.com), una empresa familiar que propone la emocionante experiencia de vivir el vino desde la cepa hasta la copa con los cinco sentidos. Realice una visita a sus instalaciones copa en mano y disfrute de la panorámica de su mirador, o bien consulte la posibilidad de realizar una visita a un viñedo centenario o de convertirse en vendimiador por un día. Relájese en su wine bar antes de continuar con la ruta.

Nos desviaremos de la A-3214 para llegar a Baños de Ebro por la A-3224, donde nos encontraremos de nuevo con el río. Aquí tomaremos la A-4205, la vía más cercana a su lecho, para dirigirnos a Elciego. Los amantes del senderismo tienen en esta zona la oportunidad de recorrer el GR-99, Camino Natural del Ebro. Ya de lejos se distinguen las dos torres desiguales de estilo gótico-renacentista de la iglesia de San Andrés. En el núcleo urbano, la plaza Mayor es el centro neurálgico, donde se reúnen dos de los edificios más emblemáticos: el Ayuntamiento y la ermita de Nuestra Señora de la Plaza, de planta octogonal. En las afueras, merece la pena ir hasta la ermita de San Vicente, que dispone de bellos miradores sobre Rioja Alavesa desde los que obtener panorámicas privilegiadas.

Aunque quizás hoy en día el elemento más destacado de Elciego no es un edificio religioso ni un monumento histórico, sino una bodega cuya construcción ha dado la vuelta al mundo y simboliza ya La Rioja más moderna. La Ciudad del Vino Marqués de Riscal (www.marquesderiscal.com) es un complejo que incluye la antigua bodega de 1858 y un nuevo edificio diseñado por el arquitecto canadiense Frank O. Gehry. Acoge un lujoso hotel, un centro de spa con vinoterapia y dos exclusivos restaurantes asesorados por el chef riojano Francis Paniego. Las formas del nuevo edificio recuerdan mucho a las de la otra gran obra de Gehry en el País Vasco, el Museo Guggenheim de Bilbao.

Otra clásica bodega que tiene su sede en Elciego es Viña Salceda (www.vinasalceda.com), donde puede iniciarse en las técnicas de cata, conocer el proceso del vino y relajarse en sus viñedos.

Continuaremos por la A-4208, siempre cerca del río Ebro, hasta llegar a Lapuebla de Labarca, donde además del Camino Natural del Ebro, puede recorrer un tramo del GR-120, Camino Ignaciano, que resigue las huellas de San Ignacio de Loyola. En este punto puede cambiar de perspectiva y conocer el río Ebro desde dentro, con una amena excursión en kayak entre Elciego y Lapuebla guiada por Lapuebla Kayaks (www.lapueblakayaks.es).

El Enobus es un servicio de autobús que conecta varias ciudades con Rioja Alavesa y que realiza un recorrido en el que se incluyen vistas panorámicas y un guía acompañante que proporciona explicaciones en las visitas a municipios, eventos y bodegas de la Ruta del Vino de Rioja Alavesa, con degustación de vino. Según la fecha, el contenido turístico y los destinos son diferentes.

Los puntos de partida son: Bilbao, Vitoria, Eibar, Bergara y Arrasate (se necesita un mínimo de personas), Laguardia y Labastida.

Laguardia: capital de Rioja Alavesa

Con las vistas del Ebro en la retina, volvemos a poner rumbo norte hacia la sierra de Cantabria —por la A-3216— hasta llegar a Laguardia, una población con una estampa preciosa, que es la capital de la comarca y del vino de Rioja Alavesa. Conserva casi intacto su trazado medieval, al que se puede acceder por el pórtico de Santa María y en el que destacan las iglesias fortificadas de San Juan Bautista y de Santa María de los Reyes, así como la curiosa torre Abacial. Prácticamente todas las casas del núcleo histórico tienen su propia bodega, configurando un subsuelo lleno de galerías. Una de ellas es Casa Primicia (www.casaprimicia.com), edificio del siglo XIV donde se recogían los diezmos y primicias y donde hoy se pueden catar magníficos vinos de corte moderno.

También en Laguardia se puede visitar la bodega Ysios (www.ysios.com), que pertenece al grupo francés Pernod-Ricard y cuyo edificio, diseñado por el arquitecto Santiago Calatrava, es una de las imágenes más fotografiadas de la región. Su sorprendente relieve ondulado se mimetiza con los viñedos que lo rodean y armoniza con la sierra de Cantabria, que hace de telón de fondo.

Si tiene tiempo, invertirlo en Laguardia le puede resultar muy rentable en términos enoturísticos. Puede recurrir, por ejemplo, al Centro Temático del vino Villa Lucía (Ctra. Logroño, s/n; T. 945 600 032; www.villa-lucia.com), situado en la antigua finca de recreo del fabulista Samaniego —hijo de Laguardia— y rodeado por un relajante jardín botánico. Además de ofrecer todo tipo de servicios turísticos en su restaurante y salas, dispone también de una imaginativa propuesta de actividades lúdicas relacionadas con el vino, como la yincana enogastronómica, la cata de uvas o la experiencia en viñedo. Y si lo que realmente necesita es descansar, no deje pasar la oportunidad de hacerlo en el Wine Oil Spa del Hotel Villa de Laguardia, un placer para los sentidos.

Proseguiremos nuestro itinerario, ya en su tramo final, por la A-3228, que nos conducirá por el pequeño núcleo de Elvillar y Lanciego. En el primero de ellos puede visitar las instalaciones de Lar de Paula (www.lardepaula.com), una de las bodegas que más y mejor ha hecho por la modernización de la imagen dRioja en general. En Lanciego podemos visitar el trujal de aceite más antiguo de la comarca y descubrir los secretos de la elaboración del aceite de oliva.

La siguiente parada de la ruta es en Oyón, población a la que puede llegar de dos formas desde Lanciego: si quiere volver a disfrutar de los paisajes del Ebro, tome la A-3220 hasta Assa y luego vire por la A-3226; si prefiere el entorno de montaña, diríjase por la A-4209 hasta Yécora, donde la A-2126 le conducirá con rapidez al destino. En Oyón, a las puertas de Logroño, se encuentran las instalaciones de dos bodegas de referencia de la D.O.Ca. Rioja, con un notable prestigio internacional. Por un lado, Bodegas Faustino (www.bodegasfaustino.com) ofrece visitas con la denominada «cata de los 5 sentidos», además de la posibilidad de disponer de botelleros privados en la propia bodega. Por otro lado, Valdemar (www.valdemar.es) es también visitable para descubrir algunos de sus sorprendentes productos elaborados con antiguas variedades recuperadas.

Para finalizar, la ruta se dirige de nuevo al norte, muy cerca del límite con Navarra, por la A-3226. Llegamos a Moreda de Álava, donde el aceite de oliva es un producto de gran tradición. Se pueden ver olivares centenarios en sus alrededores, así como visitar el trujal cooperativo La Equidad, donde se puede descubrir el proceso de elaboración del aceite de oliva, tanto tradicional como moderno, pues cohabitan ambas maquinarias. El punto y final de nuestra ruta en coche se sitúa en Labraza, una villa con un preciosos centro histórico amurallado, en el que resulta muy recomendable recalar durante una de sus visitas teatralizadas, ambientadas en la época medieval.

Laguardia. © Peizais - shutterstock

Info práctica

Aparcamiento DE autocaravanas Oyón

C/ La Espina. 01320 Oyón

N 42° 30 33'', W 02° 36' 30''

) +34 945 622 190

www.ayuntamientodeoyon.com

aoyon.archivo@ayto.araba.eus

Abierto todo el año. Gratuito. 12 plazas.

Este área para caravanas se halla a unos 500 m del centro de Oyón. La estancia máxima es de 72 h. Cuenta con servicio de vaciado de aguas grises y negras, además de agua potable. Es una zona accesible en silla de ruedas y se admiten animales. A unos 200 m hay una zona de pícnic, bares y restaurantes.

Área de Labastida

C/ Fray Domingo Salazar, 21

01330 Labastida

N 42° 35' 17'', W 02° 47' 45''

) +34 945 331 015

www.labastida-bastida.org

Abierta todo el año.

Gratuita. Electricidad: 2 euros/hora. 4 plazas.

Área económica para autocaravanas y caravanas donde se puede pernoctar, y poco más. La estancia máxima es de 48 h. Dispone de agua, electricidad, descarga de aguas residuales e inodoros, e iluminación. Las vistas sobre Labastida, a un tiro de piedra, son bonitas.

Camping Fuenmayor

Avenida de la Estación, 42

26360 Fuenmayor

N 42° 28' 57.9", W 2° 34' 05.2"

) +34 941 450 330 y 607 417 347

www.fuenmayor.com

camping@fuenmayor.com

Electricidad 4,95 euros.

A tan solo 4 km de Lapuebla de Labarca, está situado al lado del río Ebro y rodeado de viñedos, con la sierra de Cantabria como telón de fondo. Dispone de múltiples servicios, como baños adaptados para discapacitados, servicio de autocaravanas, zona wifi, agua caliente, parque infantil, piscina, cafetería, actividades, etc.

Península Ibérica

La Rioja

La D. O. más importante de España tiene su territorio en el alto valle del río Ebro, guarecido de los vientos atlánticos por la sierra de Cantabria. Sus viñedos se encuentran repartidos por las comunidades de La Rioja y Navarra, además de la provincia de Álava. Un espacio amplio y variado donde adentrarse de la mejor manera en la más honda tradición del vino español.

Esta ruta recorre con detalle las dos subzonas de la D.O.Ca. Rioja que se encuentran en territorio de la comunidad de La Rioja. Comienza por el extremo suroriental del territorio de la Denominación de Origen, en la ciudad de Alfaro (Rioja Baja), para realizar un itinerario en dirección noroeste pasando por Calahorra y Logroño, donde se interna en La Rioja Alta antes de llegar al punto y final en Haro. Desde allí, es posible continuar por la ruta de Rioja Alavesa, al otro lado del río Ebro, realizándola en el sentido inverso al que seguimos en nuestra ruta anterior.

Rioja vivió su desarrollo inicial como zona productora y comercializadora de vino en la segunda mitad del siglo XX. Las consecutivas afectaciones de oidio y filoxera en los viñedos franceses obligaron a los negociantes de vinos de aquel país a buscar el producto que necesitaban en otro lugar. El más cercano era Rioja, que desde entonces adquirió un estilo que se asemeja mucho al bordelés.

• Distancia: 130 kilómetros de ruta

• Puntos de la ruta: Alfaro - Aldeanueva de Ebro - Calahorra - Logroño - Navarrete - Fuenmayor - Cenicero - Briones - Haro

Alfaro y Calahorra: La Rioja Baja

El punto de partida de la ruta se sitúa en Alfaro, donde comienza —o acaba— el territorio de la D.O.Ca Rioja. Esta es, pues, la primera ciudad de La Rioja. Sin embargo, aquí todavía no podrá respirar en el ambiente la cultura del vino como lo hará más adelante, cuando se adentre en el corazón de la región.